Qué rica que es la pizza casera!!! Más rica todavía cuando no lleva mucho trabajo. porque eso de estar horas y horas en la cocina para preparar algo que dura 5 minutos en la mesa, para mí, no tiene mucho sentido. Está bueno poder encontrarle el “atajo” a las recetas para que no sean tan complicadas y para que el resultado sea igual de espectacular.
Mi “atajo” para hacer pizza: usar levadura instantánea seca (y vas a ver que uso mucha levadura seca en mis recetas). Panaderos, pasteleros y abuelas del barrio (incluida la mía), no se enojen conmigo por dejar de lado a la levadura fresca…me encanta la levadura fresca pero últimamente tengo un “metejón” con la instantánea seca porque:
– La puedo tener en la alacena siempre, como la harina y el azúcar , por ende
– No tengo que “salir” a comprarla. Si tuviese al almacenero o el super a una 1 cuadra, no sería gran problema pero, si por cada ingrediente que me olvido tengo que salir al mercado, manejar y después volver…que se yo…ya me agoté y te aseguro que no termino preparando la pizza.
– Los resultados que obtengo con la levadura seca son excelentes.
– Me da la oportunidad de “improvisar”: como esos días donde digo…”voy a hacer una torta” y tengo todos los ingredientes en casa…puedo hacer lo mismo pero con masas que llevan levadura…como levantarme y pensar “voy a preparar unas medialunitas para la tarde, o un “pan CROCANTE”…lo pienso y lo hago en seguida porque tengo los ingredientes.
– me ahorro 1 paso a la hora de amasar porque la levadura seca se agrega directamente con todos los ingredientes secos, sin necesidad de andar “despertándola con el azúcar y agua tibia” previamente…si ya sé…ésto lleva solo 5 minutos, pero 5 minutos acá y otros 5 por allá van sumando y es más tiempo y, como ya saben, en casa soy bastante vaga o mejor dicho”vaga con un propósito”: el de optimizar tiempo y trabajo así mientras tanto hago otras cosas, como escribir este post 😉
Bueno, no te distraigo más y empiezo con la pizza, pero antes te quiero contar los 10 “decretos” pizzeros de una-papa:
1- “Amasarás hasta descargar toda energía negativa o insalubre”
2- “La masa descansará 2 veces: la primera para crecer, la segunda para relajarse”
3- “La salsa que usarás será recontra espesa”
4- “La temperatura del horno, recontra caliente”
5- Una vez que la masa haya levado 2 veces, no las amasarás más, sólo las estirarás.
6- “No te frustrarás si cuando la vas a estirar, se quiere achicar…simplemente la dejarás descansar un poco más”
7- “Compartirás con un amig@ y/o una cerveza fría”
8- “Tu amig@ se copará y lavará los platos. También traerá el postre :-)”
9- “Harás demás para repetir al otro día”
10- “Le agregarás alguna verdurita, para hacer de éste plato una cena completa”
A preparar la pizza entonces!
Los ingredientes: 3 tazas de harina común, 1 sobrecito de levadura INSTANTANEA seca (7 gr), 1 cucharadita y media de sal, 1 cucharadita de azúcar, 1 taza de agua tibia (tibia como la leche para un bebé) y 2 cucharadas de aceite de oliva.
Para prepararla en la batidora: para amasarla, uso el accesorio que es como un gancho. Primero pongo los ingredientes secos, los mezclo un poquito y con la máquina andando le voy agregando el agua con las 2 cucharadas de aceite despacito. La batidora es como que te “avisa” cuando la masa está lista, apenas se despega de las paredes del bowl y queda “enganchada en el gancho”, la cantidad de líquidos e ingredientes secos está justa. Si la masa no se unió, le agrego un poquito de agua, de a 1 cucharadita a la vez o si ya se unió y me sobró agua, no la utilizo. Este es el momento donde subo la velocidad y dejo que la masa se golpée bien contra las paredes del bowl unos minutos.
Para prepararla a mano: en un bowl, pongo los ingredientes secos y les voy agregando agua hasta que se forma un engrudo pesado. Preparo la mesada con un poquito de harina y apoyo el engrudo encima…acá empieza mi parte favorita…amasar…y hacer gimnasia…y por que no una sesión de psicólogo gratuita….quien hubiese dicho que una masa para pizza tenía semejante poder sobre mí…La verdad que termino como nueva…como recién salida de un spa!!! y tengo la cena lista, y cumplí con mi cuota de gimnasia…En este paso amaso un rato la pizza, para que todo esté bien integrado.
Una vez que la masa está lista: la pongo a descansar en un bowl aceitado y con la palma de la mano, le paso un poquito de aceite y la cubro con papel film. La dejo descansar al menos 1 hora, si son 2 mejor. La masa descansando cerca del horno prendido o en un día caluroso leva más rápido.
Mientras tanto preparo la salsa que es muy simple. Lo más importante para la salsa es que sea ESPESA , así no moja a la masa cuando la cocinás y aparte el sabor queda bien concentrado. Yo pongo un poquito de ajo a rehogar, reahogar…Cómo se escribe ésta palabra??? Bueno no importa, un poco de ajo a cocinar!!! (perdón por el”horror”ortográfico, sobretodo a mis papás que invirtieron tiempo y dinero en mi educación…es que no escribo casi nunca ésta palabra, ja!!!)
Después agrego una lata de tomate y un poco de agua para hacer que la salsa se ponga más líquida así se puede cocinar un rato con todas las especias y “hacerse de gusto”, como diría mi abuela. Le agrego una pizca de sal y 1 cucharadita de azúcar.
Después las especias. Esta vuelta utilicé laurel, orégano, perejil y la terminé con albahaca fresca de mi planta. Las hierbas secas siempre se agregan al principio, porque se hidratan y le dan sabor a la salsa, las frescas al final así siguen siendo verdes…sino se ponen negras y no queda tan lindo.
Cómo sé si la salsa está lo suficientemente espesa? Cuando le paso la cuchara, tengo que poder ver el fondo de la sartén.
Chequeo la masa y ya está lista para “desgasificarla”; Lo hago con el puño de mi mano y la divido en 2. La dejo descansar 20 minutos más…Te estarás preguntando por qué otra vez va a descansar si ya descansó, No?…Porque sino se pone en rebelde y cuando la quiero estirar se vuelve achicar y, la verdad que hace un rato me relajaste tanto que ahora no me quiero empezar a pelear con vos, mi querida masa. Te dejo unos minutos más y después te estiro.
Mientras descansa la masa preparo unos vegetales con aceite de oliva, sal y pimienta y los llevo al horno 10 minutos, porque me gustan al dente. Después subo el horno al máximo…
y mientras tanto estiro la pizza. Tengo 2 opciones, o estirarla con la mano y, una vez cocida, el interior es más aireado, o estirarla con el palo de amasar y que quede con menos aire, más finita y crocante como una galleta. A mí me gustan las dos formas, así que hice una de cada una…Ah! Y esparcí por la asadera un poquitito de aceite con la palma de mi mano.
La llevo al horno re caliente unos 6-8 minutos y la cocino a blanco (que la masa esté cocida pero no tostada). La saco del horno, le agrego salsa, queso muzzarella y la vuelvo a hornear hasta que el piso esté crocante y el queso derretido. Si le voy a agregar ingredientes extra, como los riquísimos vegetales, lo hago unos minutitos antes de que esté lista, sólo para que se calienten.
La de vegetales quedó así…Buenísima! Y sanita…
Esta otra es la de “todo lo que encontré por la heladera”: rúcula, espinaca, aceitunas negras, muzzarella, queso emmental, brie y jamón crudo…a ésta pizza le iba a poner pasta de ajo pero…me olvidé los ajos en el horno y se quemaron!!! No importa, igual me encantó ésta combinación…Qué linda panzada!!!
- 3 tazas de harina (alrededor de 380 gr)
- 1 sobre de levadura INSTANTANEA (7 gr)
- 1 cucharadita de azúcar
- 1½ cucharadita de sal
- 1 taza de agua tibia (250 ml)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- En un bowl, mezclar con una cuchara de madera la harina, levadura, sal y azúcar. Agregar de a poco el agua tibia y aceite de oliva hasta formar una masa pegajosa.
- Espolvorear la mesada con harina y amasar unos minutos hasta tener una masa lisa. Si la masa está seca, agregar agua de a 1 cucharadita, si está muy mojada, agregar harina de a 1 cucharadita. la masa será homogenea y algo pegajosa.
- Aceitar la superficie de la masa y el interior de 1 bowl. Dejar la masa descansando por 1- 2 horas dentro del bowl y cubierta con papel film, hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
- Desgasificar la masa y dividir en 2 partes. Dejar descansar 20 minutos y mientras tanto, encender el horno en máximo.
- Estirar la masa y hornear 6-8 minutos, hasta que la masa esté cocida pero no tostada (a blanco)
- Agregar salsa de tomate y queso. Hornear nuevamente hasta que el queso esté derretido y el piso, tostado.
Leave a Reply