El glaseado para tortas es una de esas preparaciones que “elevan” cualquier budín/torta que hacemos. Le da un”extra de sabor” y además ayuda a conservar la torta fresca y húmeda por más tiempo.
Es una de esas preparaciones que no necesita una “receta”. Sólo conocerle el punto justo!
Cómo hacer glaseado para tortas
Vas a necesitar: azúcar impalpable (glas) y jugo de naranja, limón, mandarina o el cítrico que prefieras.
En un recipiente, poner 2 tazas de azúcar impalpable. Agregarel jugo de limón de DE A GOTITAS!!!! El azúcar impalpable absorbe mucho líquido y no queremos que nos quede una “sopa”. Agregás unas gotitas y vas revolviendo. Por lo general con el jugo de un limón alcanza para dos tazas de azúcar impalpable. Si lo hacés con limón y no querés que quede muy ácido, le podés agregar unas gotitas de agua al jugo de limón así se diluye un poco.
Seguís revolviendo y agregando más gotitas de jugo hasta tener una preparación con ésta consistencia…
Consistencia tal, que si quisieras podrías escribir un mensaje…Yo aprovecho y te saludo!
Una vez que el glaseado está listo, esparcirlo por el budín. Acordate que el budín tiene que estar FRIO, sino actúa de esponja, lo absorbe todo y…chau glaseado! Si te parece que está un poco líquido, siempre le podés agregar un poquito más de azúcar.
Si le agregaste mucho líquido y tu glaseado se volvio “una sopa”…(yo lo he hecho, así que te entiendo si lo hiciste “a tu manera” jajaja), dividí la sopa en 2 partes y sólo a una de esas partes le agregás más azúcar….¿Por qué? Porque sino vas a necesitar todas las bolsas de azúcar del almacen para corregirlo y no creo que en tu casa tengas tanta azúcar impalpable!!!
Probálo con una torta marmolada o un riquísimo budín de banana…te va a encantar!!!
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